Por qué está de moda, para qué sirve y qué pautas habría que tener en cuenta para lograr el éxito, según el coach Ricardo Arroyo.
Entre empresarios, emprendedores, trabajadores y también organizaciones sociales, la tendencia es buscar una ayuda exterior para lograr ver lo que a veces cuesta ver. Así se llega al coaching, una disciplina en el conjugan varias disciplinas y hoy hasta se utiliza también para resolver cuestiones personales. En Salta, también es moda y, según sus promotores, es porque realmente funciona.
Para explicar de qué se trata el coaching, el coach Ricardo Arroyo visitó LA GACETA y brindó algunas pautas ciertas cuestiones que veces quejan al emprendedor.
“El coaching es una disciplina que surge hace unos 50 años en Estados Unidos con una gran presencia de latinoamericanos, ahí confluyeron diferentes saberes de la filosofía, de la biología y del ámbito empresarial. Surgió primeramente en el mundo de los deportes, en gran medida en el tenis, después se pasó al mundo empresarial y ahora abarca muchos haceres, de hecho ahora hay life coah o coaching de vida”, resumió Arroyo, quien además es empresario en Salta y fue miembro fundador de la Comisión Nacional de Coaching.
El coach (o entrenador en español) explicó que en esta área el aprendizaje también es corporal. “Esa es la enorme diferencia que tiene el coaching con la psicología”, aseguró.
Ahora bien, qué pasa cuando se recurre al entrenador con cuestiones precisas como las siguientes:
- Quiero emprender pero me falta capital
- Si te falta dinero, hagamos de cuenta que tenés que pedirlo, pero te parece (según tu emoción) que pedir no es bueno, no te gusta, pero necesitas el dinero y cruzar ese límite. Si tu cuerpo y tu emoción se niegan a hacerlo, no lo vas hacer. Tu cuerpo necesita aprender a cruzar ese límite, ahí es donde ocurre el aprendizaje corporal- respondió Arroyo, sosteniendo que el coaching trabaja sobre el terreno de la acción.
- Tengo una idea, un proyecto a emprender, pero aun no me animo a llevarla a cabo.
- Muchas veces decimos que queremos cosas, pero no estamos dispuestas a tomar el compromiso que implica. Entonces – pregunta- ¿quiero lo que digo que quiero? Hay un ejercicio interesante que es imaginarse que ya ha ocurrido, en toda situación cuando queremos lograr algo, necesitamos elegir y elegir implica anular posibilidades. Muchas veces decimos que queremos cosas pero cuando es necesario tomar la decisión, que implica elegir, esto significa anular posibilidades y no estamos dispuestos a hacerlo. Entonces actuamos niños que decimos “quiero lo que digo que quiero pero no quiero anular esto, quiero seguir teniéndolo”. Elegir es pasar a la acción.
Tras responder un hipotético caso, resalta: “solo hay coaching si hay acción, porque solo con acción hay resultados”.
Según detalló, las conversaciones de coaching aportan claridad. “Muchas veces tenemos deseos, pero si los tenemos en un ámbito empresarial o en un negocio no vamos a ningún lado, porque los deseos son imprecisos, no se pueden medir y no sabemos si lo vamos alcanzar”, comentó, al tiempo que explicó que en esto es preciso definir lo que se quiere, buscar indicadores y metas. “Con cosas medibles, que se pueden identificar con claridad y con metas podemos hacer un plan y un mapa de acciones”, agregó y aseguró que de esta manera se logra los resultados.
Este mapa de acciones es un gran desafío, de acuerdo a lo que contó el coach. “Y lo digo como emprendedor también”, subrayó. Esta herramienta permite encausar el entusiasmo, la emoción que genera emprender un negocio, y el compromiso que significa sostenerlo. “Lo que hacen los coaching de negocios es aportar a esta reflexión; así se obtienen resultados bastante rápidos, por eso es que está de moda: porque funciona”, sostuvo.
- Qué es un mapa de acciones
- Es anotar los objetivos y establecer el camino crítico, es decir cuáles son las estrategias que voy a desplegar para llegar a esos objetivos. Y es muy importante cuando se llegue a esos objetivos, celebrarlos, pues si no tengo definida cuál es mi meta, no sé cuándo llego y si lo he logrado, entonces siempre estoy insatisfecho. Cuando celebro logros puedo generarme la motivación que me permite ponerme otros objetivos- respondió Arroyo.
Otra cuestión que plantean los emprendedores:
- Cómo tener mayor número clientes y lograr su fidelidad
- Una de las maneras es con compromiso. Venimos de una cultura en la cual no nos formamos como emprendedores. Necesitamos muchas veces que nos den leyes, que nos tengan cortitos. Pero cuando sos emprendedor podés tenderte la trampa de la comodidad: como no tengo a nadie que me diga qué hacer, no tengo un jefe, entonces digo “si no voy (al negocio) no pasa nada”. Ese es un problema grave del emprendedor, porque se va volviendo indulgente consigo mismo y en esa indulgencia va perdiendo compromiso. Y acá lo importante tiene que ser el otro. El propósito y el foco del negocio tienen que ser el cliente. Entonces cuando yo tengo que abrir, abro, y cuando no tengo ganas, también abro, porque ese es mi compromiso; necesito tener la autodisciplina que lo permita hacer. Ahí entra un aprendizaje corporal- recalcó el entrenador.
“Entrenar al cuerpo para tener autodisciplina es una de las claves para los emprendedores. Un emprendedor que es comprometido, es decir que pone el cuerpo donde dijo que iba a ponerlo, con ganas o sin ellas, es una clave para tener éxito”, destacó Arroyo, quien a fines de este mes iniciará un seminario de coaching destinado a “quienes tengan algún problema, quieran cambiar y estén dispuestos a aprender para lograrlo –según indicó- y también para aquellos que quieran hacer esta carrera” .
Fuente: LA GACETA (http://m.lagacetasalta.com.ar/nota/47739/vision-empresarial/coaching-algunas-claves-para-emprendedor.html?utm_source=facebook&utm_medium=social&utm_campaign=botondesktop
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